Hola amatistas, si son seguidores de Inuyasha, creo se enteraron que ya terminó la primera temporada de Yashahime, la
secuela de la historia de nuestro perro demonio favorito o mejor dicho, sobre
las hijas de él y Sesshoumaru…
En resumen, la historia se trata de las hijas de
Sesshoumaru, quienes viven en el bosque y un día se presenta un incendio el
cual, las separa. Towa llega al mundo presente y es cuidada por el hermano
menor de Kagome, hasta que un día por el Árbol del tiempo, aparecen su hermana
gemela Setsuna y Moroha, la hija de Inuyasha y Kagome, pues tendrán una misión
muy importante que cumplir…
¿Qué se puede decir de la historia? ¡Puff! Es la
secuela/Spin-Off que nadie se esperaba… pues ya tiene muchos años que la obra
de Rumiko terminó tanto en manga como en anime y, a mediados del 2020, se dio
la sorpresa de una nueva historia donde no veríamos a nuestros protagonistas
favoritos sino su descendencia.
Towa, Moroha y Setsuna, son las protagonistas de una
historia que ocurre en la era Feudal y tendrán que encontrar a un antiguo rival
de Inu no Taisho: Kirinmaru. Durante ese camino se topan con otros demonios que
desean unas perlas arcoíris las cuales, dan poderes a quienes las poseen (algo parecido
a la perla de Shikon) y al mismo tiempo, conocemos cómo fue que sus padres no
están con ellas.
Debo decir que el principio básico de la historia es simple,
pero… una de las cosas que más flaquea la historia, es su desarrollo. Algunos
de sus capítulos no terminan de cuajar o, no tienen mucho sentido mientras
otros, son los que van armando toda la historia.
En lo personal yo me divertí, pero debo reconocer que sin
importar ser una fan de Inuyasha (especialmente de Sesshoumaru), siento que
Sunrise debió tomarse más tiempo en recrear la historia porque quisieron irse
por lo fácil: nostalgia. El estudio utilizó este recurso para captar la
atención del fandom y, crear una extraña sensación de ansiedad porque no se
entendía realmente, que nos querían mostrar.
La presencia de ellos, fue el gancho para presentarnos a las
chicas que realmente son todas unas bad-ass que enamoran. Towa tiene el mismo
semblante de Rin mientras que Setsuna, es la viva imagen de su padre en versión
femenina y Moroha, la perfecta combinación de Inuyasha y Kagome.
Y bueno, después de 23 capítulos donde vimos muchos detalles
y personajes… llegó el último el cual; a más de uno, nos dejó con el alma
destrozada ¿por qué? Pues tristemente la historia termina con la muerte de
Setsuna y una escena épica de Towa recibiendo la Tenseiga de las manos de su
padre…. Dejando la historia con un final ¿abierto?
Al finalizar, nos anuncian que sí habrá segunda temporada y
la verdad, se veía venir… ¿por qué? Después del capítulo donde se confirma que
Rin es madre de las niñas, se dejaron muchos cabos sueltos que,
hasta este momento no se resolvieron… dejando un sabor agridulce en parte de la
audiencia.
Debido a esto, yo percibo el final de Yashahime como un extenso
prólogo que abre la puerta a una nueva historia, donde se podría hablar de
varios temas:
- Encontrar las Perlas Arcoíris.
- Alguna venganza de Zero.
- El final de Kirinmaru
- El destino de Setsuna
- La maldición de Rin
- La existencia de Inuyasha y Kagome
- Los poderes de Towa/Moroha
- El molino del tiempo
Una de las cosas que hasta el momento me tienen un poco
inquieta, fue el rito de coraje y cobardía de Sesshoumaru. Si analizan toda la
historia, la prueba existió desde que ellas vivían en el bosque.
Se puede decir que al desaparecer una, Setsuna fue
“protegida” y entrenada para sobrevivir, aunque el único “defecto” que tenía
fue su sangre youkai que, al parecer, le costaba mucho trabajo dominar.
En el caso de Towa, las cosas eran muy diferentes pues ella
jamás presentó esa conducta descontrolada, simplemente sentía que no pertenecía
al mundo moderno… hasta que regresó a la Era Feudal.
Al final, ella libera su poder demoniaco al ver sin vida a su hermana, como si realmente ese era su destino. De hecho, desde que se anunció la historia, se hacía mucho énfasis sobre su importancia, aunque al inicio fue opacada por su hermana y prima. Con el paso de los capítulos tomó mayor presencia hasta convertirse en “Hija de Seshoumaru”.
La verdad, me dio mucha pena la muerte de su hermana. Considero que Setsuna no merecía ese final, pero…. Como lo establece ese rito, una de las dos debía “perecer” para que la otra fuera digna de su padre.
Dudo mucho que la historia de Setsuna, termine ahí… la
pérdida de Colmillo sagrado, es momentánea porque Towa será quien logre
replicarla y con ello, podría ser que la regrese a la vida. En el caso de Rin, el
estudio tendrá que dar una buena explicación de cómo se salvará o bien, romper
con la maldición que la tiene atada a Zero…
Hay muchas dudas, pero existe algo muy claro: Sesshoumaru
será el encargado de resolverlas a través de su hija y, Moroha. En este momento
es mucho más importante que su hermano; a menos que le pase algo, pues tanto él
como Kirinmaru, están destinados a desaparecer por las decisiones que han
tomado.
¿Qué más decir? La idea de una secuela fue buena, sólo que
el estudio tendrá que sentarse a desarrollar con calma la historia, porque
siento que desperdiciaron muchos capítulos. Ya no pueden recurrir al recurso de
la nostalgia porque el fandom estará al pendiente de la secuela y las chicas,
tendrán que demostrar que son dignas hijas de estos personajes que nos han acompañado
por años.
La primera parte de Yashahime, termina como un prólogo… la
verdadera historia la veremos en la secuela. Ojalá que el estudio Sunrise evite
cometer los mismos errores y en especial, los fans consuman los productos
originales, pues éstos son un índice para conocer el verdadero éxito de un anime
y creo que la historia de las princesas demonio, lo vale.
Lo bueno:
El canon de Sesshoumaru y Rin, pues al final de la historia
original muchos quedamos con la ilusión de que ellos pudieran ser una pareja.
Las personalidades de Towa, Setsuna y Moroha son frescas,
con muchos detalles de sus padres que conquistaron a los fans.
Lo malo:
El desarrollo de algunos capítulos no tienen sentido,
parecieran que los hubieran cambiado al último momento.
Manejaron la serie con la idea de que, en algún momento, los padres aparecerían; sólo se supo que Sesshoumaru, ha estado detrás
de todo lo que pasa. Él cuida desde las sombras a sus hijas, y de Rin.
Lo peor:
Algunos villanos no terminaron de convencer. La mayoría de
los capítulos son auto conclusivos y no dieron tiempo para conocerlos mejor.
Zero es un personaje detestable, pues al terminar la serie
te das cuenta que todo lo que hizo fue producto de los celos y resentimientos.
El desaparecido:
Shippo fue el personaje más olvidado de todo Yashahime, sólo
apareció en el primer capítulo y después, nunca se supo de él. Ojalá aparezca o
se sepa algo, en la secuela.
¿Qué te pareció la serie y el final?
¿Cuáles son tus teorías?